Los dispositivos móviles, las tabletas y los portátiles pueden ser de gran ayuda para los padres, ya sea para entretener a los niños durante los largos viajes en carro o para mantenerlos distraídos. Además, con el "boom" de los dispositivos para niños, las aplicaciones educativas diseñadas para estimular la creatividad y el tiempo que pasan frente a la pantalla, estos dispositivos tienen varias ventajas, pero también desventajas, entre ellas los efectos de las dañinas luces azules en sus ojos.

La luz azul que emiten las tabletas, los televisores, los ordenadores y los teléfonos móviles puede afectar a la visión y envejecer prematuramente los ojos.Investigaciones anteriores han demostrado que la exposición excesiva a las luces azules puede causar:

Fatiga ocular digital: La luz azul de las pantallas de los dispositivos digitales puede disminuir el nivel de contraste, lo que conduce a la fatiga ocular digital. La fatiga, los ojos secos, la mala iluminación o la forma en que te sientas frente a tu ordenador también pueden causar fatiga ocular. Los síntomas de la fatiga ocular incluyen dolor en los ojos o irritados y dificultad para concentrarse.

Lesiones de la retina: los estudios sugieren que la exposición continua a la luz azul con el tiempo puede producir daño a las células de la retina. Esto puede causar problemas de visión como la degeneración macular relacionada con la edad (IMD).

Además, estudios han demostrado que puede interrumpir el sueño de los más pequeños. La luz azul interfiere con el ciclo natural de sueño, llamado ritmo circadiano, al suprimir la producción de melatonina, la hormona que ayuda a que el cuerpo y el cerebro se relajen.

Hablemos de estadísticas

Según los estudios, el 72% de los niños de ocho años o menos habían utilizado tabletas o teléfonos inteligentes en 2013, y casi un tercio de ellos tenía menos de dos años. Aunque la experiencia puede hacer que sean hábiles y tecnológicos, las investigaciones han demostrado que los efectos de la luz azul emitida por los videojuegos, los teléfonos móviles, las tabletas y los ordenadores pueden afectar a la visión de los niños, y a su salud en general.

Nuestros ojos contienen receptores que se ven directamente afectados por la luz del espectro azul. Cuando esta luz entra en el ojo, envía una señal a través del nervio óptico a la glándula pineal, que desactiva la producción de melatonina en el cerebro.

¿Cómo afecta la luz azul a la visión de los niños? 

La luz azul, una de las partes del espectro electromagnético visible para los seres humanos, proporciona la iluminación básica y también puede ayudar a explicar por qué los niños se sienten tan atraídos por el brillo de sus dispositivos móviles.

Pero los efectos de un exceso de luz azul en la vista son variados y potencialmente perjudiciales, dependiendo del tiempo que el niño pase mirando las pantallas. Esto se debe a que los ojos inmaduros aún no han desarrollado la pigmentación protectora para ayudar a filtrar la dañina luz azul que sale constantemente cuando miramos fijamente las pantallas.

¿Cómo minimizar el impacto de la luz azul en los niños? 

Para reducir los efectos negativos de la exposición a la luz azul, limite la cantidad de pantallas de entretenimiento que ven los niños a dos horas al día. Es recomendable, mantener las tabletas y otros dispositivos electrónicos lejos de las habitaciones de los niños en la medida de lo posible.

Las gafas con filtro de luz azul son una buena opción para que tus hijos las utilicen cuando trabajen en sus tareas sin exponerse a los efectos de la luz azul de las pantallas de los ordenadores.

También se ha descubierto recientemente que la luz azul contribuye a la aparición temprana de la maculopatía, también conocida como fatiga visual crónica.

Los lentes de policarbonato amarillo ofrecen protección completa de la luz azul en muchos casos. Igualmente, es primordial preguntar a su doctor de cuidado visual por una recomendación de un lente que filtre la luz azul.

Lo que pueden hacer los padres

Supervisar el tiempo que pasan frente a la pantalla. El exceso de consumo digital de la familia, según informes de la American Academy of Pediatrics (AAP), apuntan a problemas que van desde desgaste visual hasta problemas de sueño vinculados con pasar demasiado tiempo frente a una pantalla. 

Sueño. Cuando no se duerme lo suficiente, los ojos se sienten cansados y doloridos. La AAP recomienda que los niños no duerman con dispositivos en sus habitaciones, incluyendo televisores, computadoras y teléfonos inteligentes. Además, recomiendad evitar la exposición a pantallas durante 1 hora antes de irse a dormir. 

Ejercicio. Dejar a un lado el dispositivo o alejarse de la computadora o televisión puede ayudar a evitar problemas de los ojos y de visión causados por el exceso de tiempo frente a la pantalla. La AAP recomienda que los niños de 6 años en adelante hagan al menos 60 minutos de actividad física por día. 

Tomar descansos frecuentes. A menudo, los niños están tan absortos en lo que están observando que no notan los síntomas del cansancio ocular, por eso es importante recordarles que tomen pequeños descansos durante cada actividad. La Asociación Optométrica Americana (American Optometric Association) recomienda la regla 20/20/20: aleje la vista de la pantalla cada 20 minutos y concéntrese en un objeto que esté a lo lejos durante un mínimo de 20 segundos.

Posición de la pantalla.Asegúrate de que la pantalla del computador o tablet de tu hijo esté levemente por debajo del nivel de los ojos, para evitar sequedad en los ojos.

Énfasis en la iluminación. Para reducir el resplandor y la fatiga ocular, considera el nivel de iluminación de una habitación al usar una computadora u otras pantallas. Lo recomendado, es que esta iluminación debe ser más o menos la mitad de lo que sería para otras actividades como escribir en papel o hacer manualidades. 

Hacer citas periódicas de control oftalmológico.Si tu hijo tiene visión borrosa o problemas de visión similares, tal vez no lo diga. Es por esto que son importantes los exámenes de visión periódicos. En CEDCO contamos con profesionales de confianza que podrán otorgar el tratamiento adecuado según cada caso. Haz tu cita online o visítanos en la calle 48 No. 27-49, Bucaramanga.